La serigrafía es uno de los mecanismos más empleados para la impresión de diseños en todo tipo de materiales, tanto por empresas industriales como en el ámbito artístico.
A través de este post, desde Huella Digital te contamos qué es la serigrafía, cuál es su origen y los pasos a seguir para su aplicación, así como las principales diferencias entre la serigrafía y la impresión digital.
¿Qué es la serigrafía?
La serigrafía se define como el mecanismo que permite estampar o imprimir un diseño en una superficie mediante la aplicación de tinta sobre la malla tensada en una pantalla en la que se coloca la imagen.
Se trata de una técnica económica y muy versátil, lo que la convierte en una de las técnicas de estampación más demandadas actualmente.
Origen de la serigrafía
Los primeros usos de la serigrafía se produjeron hace miles de años en Egipto y China. En el ámbito comercial y artístico, su empleo comenzó hace más de 100 años, consolidándose como mecanismo de estampación de imágenes sobre telas, papel y plástico a principios del siglo XX.
¿Cómo se hace una serigrafía?
Preparación del diseño y del fotolito
El primer paso es elegir el diseño que queremos serigrafiar e imprimirlo en un cliché que posteriormente utilizaremos de plantilla.
A estos efectos, el cliché, también denominado en serigrafía digital como fotolito, es el resultado de la impresión opaca de la imagen deseada sobre una película o material translúcido. La función del fotolito es evitar que durante la fase posterior de insolación la luz llegue a la zona de la pantalla donde la imagen está impresa en negro.
Preparación de la pantalla
La pantalla está formada por un marco de madera o aluminio en el que debes entesar lo máximo posible una malla o tela. El tamaño de la pantalla dependerá de las dimensiones de la imagen que queramos estampar y el tipo de diseño determinará que debamos usar un tipo u otro de malla o tela.
Emulsionado de la pantalla
Preparada la pantalla, es necesario extender de forma homogénea a lo largo de la malla un producto específico de carácter líquido que reacciona al entrar en contacto con la luz. Dado el carácter fotosensible de esta mezcla, este paso es necesario realizarlo en una habitación oscura.
Insolación
La insolación es el paso necesario para poder revelar la imagen, colocando la pantalla con el negativo superpuesto sobre la misma mirando a la luz durante el tiempo requerido en cada caso. La mezcla es fotosensible, por lo que el objetivo es que toda la pantalla reaccione a la luz salvo el diseño, gracias a la parte oscura del fotolito.
Revelado
Terminado el tiempo de insolación, nuestra siguiente tarea será la de dejar el marco libre del exceso de la mezcla de carácter fotosensible aplicada anteriormente, mediante su lavado con una cantidad de agua suficiente para dejar al descubierto el diseño que posteriormente entintaremos. Tras ello, será necesario esperar a que la pantalla se haya secado completamente.
Impresión de la imagen y secado de la tinta
Finalmente, es necesario plasmar el diseño pretendido sobre la superficie final mediante la aplicación de pigmentos líquidos especiales para serigrafía en el interior del marco de la pantalla, extendiendo la tinta de forma homogénea por toda la malla con la ayuda de cualquier herramienta adecuada para ello.
Para que el trabajo realizado haya valido la pena, es imprescindible asegurarse de que la tinta con la que se ha serigrafiado la imagen ha quedado perfectamente adherida a la superficie, para lo cual es imprescindible la aplicación del proceso de secado pertinente.
Diferencia entre serigrafía e impresión digital
La impresión digital se articula como un mecanismo de impresión mediante la inoculación de tinta de forma inmediata sobre el soporte deseado. Las principales diferencias con la serigrafía son:
- La impresión digital permite sellar con mayor nitidez que la serigrafía cualquier detalle de la imagen.
- Mientras que en la serigrafía cualquier variación en las dimensiones del diseño supone tener que preparar una pantalla diferente, la impresión digital permite una mejor adaptación a nuevos requerimientos que puedan surgir durante el proceso de estampación.
- Mientras que en la serigrafía cada color requiere una pantalla distinta, este impedimento no existe en la impresión digital.
- La serigrafía es más económica que la impresión digital y permite la impresión sobre cualquier tipo de tejidos; no así la impresión digital que solo permite imprimir imágenes sobre tejidos orgánicos y sintéticos.